Un poco mas de playita, aire puro mezclado con su suave humedad, sonido de las olas al romper, sol deslumbrante junto con una fresquita brisa, los finitos granos de arena que rozan tu piel al andar...Tan paradisíaco e increíble sigue siendo Javea en cualquier época del año, nunca me canso de venir y ganas para volver siempre las hay. Sobretodo en estas épocas del año que hay poca gente y las playas y calas están vacías en comparación con el verano, se agradece, esa paz interior e individual de cada uno que nos ayuda a desconectar de los problemas y angustias del día a día,y mirar al mar infinito cuyo fin es imposible ver...
Aparte de la magia que tiene Javea y todas sus calas y playas de aguas cristalinas también es un gusto poder disfrutar de estas cosas junto a la familia. Este puente fue mas bien familiar que aunque todos tengamos momentos de tensión y gritos, las risas no nos las quita nadie, como en la foto de arriba, capturando ese momento sin parar de reirme mientras veía a mi padre cual paparazzi.
Estas fotos pertenecen a una cala donde no suele ir mucha gente ya que es complicado adentrarse en ella, además de la necesidad del coche para llegar hasta esa zona en particular, poco urbanizada a pesar de que hay unos cuantos chalets situados en primera fila. Lo mejor es la cantidad de naturaleza y diferentes plantas que se pueden apreciar. Esta cala es especial ya que hay una roca situada en el centro rodeada por el mar, tiene una cueva interior por la que tienes que bucear un poco para adentrarse en ella, no pude llevar la cámara de agua para hacer fotos pero era increíble... la próxima vez no faltara!!
"el tiempo corre,
corre, mas te vale ser más rápido que él para que no te pille, porque el tiempo
vale más que cualquier cosa de este mundo y no conviene derrocharlo, así que
déjate de relojes y de mirar la hora porque cuando estas pendiente de la hora
el tiempo te alcanza"
No podia faltar
la historia que tiene esta falda, una de mis favoritas, decorada por esas
sabias palabras que un hombre hippie, una vez me dijo en el mercadillo de las
Dalias durante mi viaje a Ibiza.
Este hombre de aspecto
mayor, con su pelo canoso y largo lleno de trenzas que acompañaban a un rostro
de barba blanca, donde se apreciaban las arrugas marcando el paso de los años,
además de venderme esta falda me dio millones de consejos que me hicieron ver
la vida de muchas maneras distitas… Ahora todos los años me paso por su pequeño
puestecito.
No hicimos gran cosa en comparación con otros años, simplemente compramos unas pinturas, ya que nos apetecía hacer algo especial este día que solo se celebra una vez al año. Nos basamos en fotos de internet como veis en las fotos
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